El Ayuntamiento multa a la Comunidad de Madrid por no acometer las obras necesarias en el Estadio de Vallecas

Yo no soy el típico aficionado del balómpie, no soy futbolero, no soy un rayista acérrimo que cada fin de semana se muerde las uñas de los nervios o canta hasta dejarse la voz para animar a los jugadores del Rayo Vallecano, pero claramente simpatizo con el sentimiento Vallecano hacia su equipo de fútbol (y todas sus categorías).

Desde hace años el Estadio de Vallecas sufre un deterioro acuciante, no solo en lo referente a decisiones directivas y mediáticas, en este caso hablamos de estructurales, del estado del propio estadio.

Para entender toda la situación hay que poner en antecedentes:

En el año 2002 el Área de Urbanismo del Ayuntamiento de Madrid redactó un informe en el que requería a la Comunidad de Madrid (propietaria del Estadio) la reparación de múltiples daños en las estructuras, graderíos y partes inferiores de las gradas.

La Comunidad de Madrid cedía al club (al Rayo Vallecano de Madrid, S.A.D.) el uso del estadio siempre y cuando este desempeñase las labores de mantenimiento (incluidas las correspondientes a obras de conservación, reposición de material de las instalaciones, consumo de agua, energía eléctrica, etc), quedando la Comunidad de Madrid como un tercero en discordia.

Tras el paso de varios años, en 2012 se realizó una revisión del Estadio que arrojaba como resultado una Inspección Técnica de Edificio desfavorable, algo que no ha evitado que el club pueda continuar sus actividades y por decirlo de una manera, no subsanar correctamente las deficiencias que se han ido dando en el estadio y la Comunidad de Madrid ha ido prorrogando la ejecución de cualquier obra al respecto (a pesar de que en el acuerdo se cede el uso del Estadio al club vallecano, la Comunidad de Madrid es la propietaria de dicho complejo deportivo).

En Julio de 2015 el Ayuntamiento de Madrid realizó una nueva revisión con la que se constató el agravamiento de la situación y las posibilidades de que este conllevase a futuro algún tipo de riesgo, se requirió nuevamente a la Comunidad de Madrid que llevase a cabo las medidas correctoras necesarias. Nuevamente la Comunidad de Madrid no llevo a cabo dicho requerimiento y el propio Ayuntamiento se vio obligado a acometer las obras de manera subsidiaria.

En Abril de 2016 la situación se repetía cuando el Ayuntamiento solicitaba la presentación del Certificado Técnico de Vigilancia con el cual se reiteraba la realización de las obras y reparaciones necesarias del complejo deportivo y la Comunidad de Madrid repetía su actuación, obligando al Ayuntamiento a imponer una multa a la Comunidad de Madrid por no cumplir con este segundo requerimiento y a su vez, solicitar el reintegro a las arcas municipales de los costes de las obras realizadas, unos 81.000 euros.

Podemos ir enumerando muchas de las deficiencias presentes en el estadio:

Grietas en graderíos, pilares, goteras (o cataratas) cerca de cableado eléctrico, vasos de plástico como improvisados retenes de goteras en las zonas técnicas de los cámaras de televisión, asientos con matojos, suciedad y heces de pájaros acumulada en ciertas zonas de las gradas y en los mismos asientos, pasillos exteriores de los graderíos sin iluminación, barandillas oxidadas, puertas principales de salida o evacuación en caso de algún altercado cerradas, baños sin limpiar desde hace meses, sin agua potable, inodoros estancados, problemas en los accesos para personas con movilidad reducida… problemas de seguridad y de insalubridad.

Prueba de todo ello son las siguientes fotos que los propios aficionados y aficionadas han ido compartiendo en las redes sociales para dar constancia del estado general del estadio:

Imágenes de los Pasillos, cimientos, baños y aledaños

Vasos contra goteras

Asientos

Urinarios y aseos

https://twitter.com/K3T0/status/754405990108364804

Puertas de acceso y Vallado exterior

Cableado eléctrico

Goteras

Tras tener todos estos datos, uno puede pensar lo siguiente:

«El estadio tiene una ITE desfavorable, no se ha realizado en el momento oportuno las actuaciones para corregir o subsanar esta situación, la tardanza en la toma de decisiones políticas, tanto en la ejecución, como en la burocracia y en la imposición multas…los aficionados han tenido que reunirse con los concejales del Ayuntamiento en varias ocasiones para dar a conocer la situación del Estadio…

¿Qué ha hecho la Junta de Puente de Vallecas al respecto…? ¿Cómo es que se ha tardado tanto en tomar cartas en este asunto? ¿La Liga no tiene nada que decir sobre esto? ¿Y la directiva va seguir en su misma tesitura? ¿Por qué los aficionados aguantan esto? ¿Por qué no hacen un partido de gradas vacías?»

He visto una mayor relevancia o boom mediático en la prensa sobre el caso de Román Zozuluya que sobre la situación de estadio, he visto un interés mayor de la directiva por las pancartas de las peñas y que no tapen los anuncios de los patrocinadores que por la integridad del estadio, y un silencio generalizado por parte de La Liga, la cual ahora no tiene nada que decir sobre un Estadio en el que hay tantas deficiencias, hablamos de problemas que atañen a la seguridad de los espectadores y trabajadores del propio estadio.

Tras que la multa del Ayuntamiento a la Comunidad de Madrid haya saltado a la palestra mediática de la prensa madrileña y deportiva, la Comunidad de Madrid ha anunciado con gran celeridad que invertirá 1,8 millones de euros para subsanar los problemas detectados en la ITE del Estadio.

El Estadio de Vallecas es propiedad de la Comunidad de Madrid desde 1989 y se llegó a un acuerdo de cesión de uso con el Rayo Vallecano hasta el 29 de junio de 2019.

En la última comisión de Desarrollo Urbano Sostenible del 20-09-2017 (Intervalo del 1:02:35 al 1:10:12) se ha tratado este tema por la concejala socialista Mar Espinar y la respuesta de la Directora General de Control de la Edificación, Ana Perpiñá Carrera:

Esta situación general que se cierne en el Rayo Vallecano, los problemas del estadio, la disputa abierta del Ayuntamiento y Comunidad de Madrid, la denuncia de los accionistas al presidente del club por la falta de cuentas y actas, la tensión vivida cada fin de semana que juega el Rayo en casa por los intentos de limitar la exhibición de pancartas de peñas y aficionados por decisión de la directiva y los últimos despidos de empleados, no hacen más que demostrar que el Rayo Vallecano, como club deportivo, está de capa caída.

Para terminar este artículo he de reiterar lo que decía al inicio del mismo, no soy un aficionado, forofo o futbolero acérrimo del club vallecano, pero puedo asegurar que los que diariamente vemos las quejas de los aficionados, vecinas y vecinos que van al Estadio de Vallecas a disfrutar de los partidos con su familia y amigas y amigos, sabemos que en Vallecas «No somos tontos», sabemos que el Estadio de Vallecas es una patata caliente que se han estado pasando los responsables de su mantenimiento y cada vez son más los vallecanos que «Odiamos el fútbol moderno» en donde prima la imagen televisiva que el bien, la seguridad y el disfrute del aficionado que llena las gradas, prima mostrar buenas noticias e imágenes en la prensa de cara a los posibles compradores, patrocinadores y canales televisivos, que cuidar a los abonados que año tras año han mantenido el espíritu rayista vivo contra viento y marea.

Veremos que sucede en los próximos meses y si las palabras se las lleva el viento o son hechos palpables y tangibles para la afición vallecana.


Redacción
Portal Vallecas
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